Iniciativa contó con la opinión de la Asociación de Magistrados durante su tramitación.
La Presidenta Michelle Bachelet promulgó este martes el proyecto de ley que crea tres tribunales de justicia en Alto Hospicio, Mejillones y Cabo de Hornos y que permite la reasignación de 77 jueces para regiones, con el objetivo de cubrir la demanda generada en materia penal, familiar, laboral y cobranzas en una ceremonia a la que asistieron autoridades y el Presidente de la Asociación de Magistrados, Álvaro Flores.
La medida, que fue adoptada dado el crecimiento demográfico de esas zonas y la lejanía de algunas de ellas de los centros urbanos, beneficiará a 53 juzgados existentes que presentaban sobre carga de trabajo, los cuales recibirán uno o más jueces para mejorar su gestión.
Durante la ceremonia realizada en el Palacio de Tribunales, la Mandataria destacó que “con esta nueva ley estamos redistribuyendo de manera más eficiente la valiosa labor que ejercen los magistrados de nuestro Poder Judicial, poniendo la prudencia, el conocimiento y el criterio de 77 jueces al servicio de las comunas más apartadas”.
En ese contexto, subrayó que con esta decisión se acelerarán los plazos de tramitación de causas y los nuevos casos que ingresen podrán ser resueltos en menor tiempo, cerrando en un 41% la brecha de necesidad de jueces a nivel nacional.
“Son pasos concretos para que nuestro sistema de justicia responda de mejor manera a las necesidades de comunas que han visto incrementado su volumen de población en los últimos años y que se encuentran a una distancia considerable de los centros urbanos de sus regiones”, añadió la jefa de Estado.
Asimismo, recalcó la importancia de la promulgación del proyecto de ley que establece un sistema informático e imparcial de distribución de las causas, el cual fue creado por moción de los senadores Isabel Allende (PS), Pedro Araya (IND), Alfonso De Urresti (PS), Felipe Harboe (PPD) y Rabindranath Quinteros (PS).
Dicha iniciativa eliminará la regla de distribución por turnos que hoy se aplica en aquellos juzgados que no son asiento de la Corte de Apelaciones, lo cual provoca desequilibrios en el volumen de causas que recibe cada uno. Es decir, evitará que se sobre cargue una unidad determinada, debido a su rapidez de gestión u otra razón.
“Con esto estamos reforzando la imparcialidad del funcionamiento del sistema judicial”, dijo Bachelet, indicando además que con esta ley se estandarizará la regla de distribución a través de un sistema computacional que asegurará objetividad, precisión, igualdad y transparencia.