La Asociación Nacional de Magistradas y Magistrados (ANMM), en relación con la crisis que mantiene a cerca de 40 mil niños, niñas y adolescentes -NNA- con medida de protección decretada por un tribunal sin representación jurídica por abogado o abogada frente al sistema de justicia de Familia, declara lo siguiente:
1.- La judicatura especializada adscrita a esta organización gremial y nucleada en su Comisión de Infancia y Familia, ha formulado reiteradamente llamados a la autoridad y poderes colegisladores advirtiendo sobre la escasa oferta de curadores ad litem capaces de asumir la representación de un grupo creciente de NNA y el efecto de esta carencia en la defensa de sus derechos por no contar con representación jurídica en número, experticia y calidad que permita asumirla;
2.- Lamentablemente y pese a nuestras advertencias, efectuadas al señor Presidente de la República, al señor Ministro de Justicia, autoridades del nuevo servicio; en el seno de la Comisión Especial de Infancia de la Cámara y a su turno del Senado durante la tramitación de sendos proyectos de ley y finalmente expuesta en audiencia temática ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la situación se mantiene;
3.- En efecto, aún tras la entrada en vigor de la ley 21.302 y la eliminación de la oferta de curadores ad litem por el Nuevo Servicio de Protección Especializada de la Infancia y Adolescencia, Chile sigue sin contar con una ley de garantías de derechos de la Niñez, que tal como hemos señalado anteriormente, es la necesaria “obra gruesa” o superestructura que debiera recoger los principios fundantes de toda la regulación local en materia de infancia.
Nuestro Estado parece estar ciego y sordo frente a la niñez vulnerada y se acerca peligrosamente a tener que responder internacionalmente por el incumplimiento de tales obligaciones.
Por todo lo anterior, requerimos a las autoridades competentes: 1) Que se adopten de manera urgente las medidas suficientes para restablecer cuanto antes el pleno respeto de los derechos vulnerados de miles de niños, niñas y adolescentes ante los tribunales de familia; y 2) La creación de una Defensoría de Representación Jurídica de la Niñez y Adolescencia gratuita, autónoma y que cumpla con los estándares internacionales al efecto y todo ello sin perjuicio de que, en lo inmediato, se asegure la adecuada representación jurídica de NNA a través de la dotación de curadores ad litem en número y preparación profesional suficiente como lo exige nuestro Sistema Interamericano de Derechos Humanos.
Santiago, 22 de diciembre de 2021.-